martes, 31 de mayo de 2011

Lo importante es ser vanidosa


Yo cada vez lo tengo más claro: para envejecer con dignidad y divinamente hay que tener un punto importante de vanidad. Me refiero a serlo en su justa medida. Hay mucha diferencia entre ser una déspota y quererse a una misma.

Conozco a muchas mujeres que cuando pasan de los 30, de repente, envejecen mal. No es culpa suya, si no de la vida, que suele serles muy jodida y agotadora. Entre los niños, el trabajo, la casa y esa puta tendencia hacia la superwomanía.


No hay tiempo para dietas, ni deportes ni cremas ni vestidos nuevos. No hay tiempo ni dinero y la vida pasa y tú sin darte cuenta te has convertido en un tipo de mujer 'madura' que NO querías ser.


Para que me entendáis, yo no quiero acabar como la vecina que va al súper en chándal y con la pinza en el pelo (con las ojeras, las arrugas y la piel asfixiada), pero tampoco quiero ser Ana Obregón. Existe un término medio entre ser una dejada o convertirte en una caricatura de lo que fuiste.

Yo, ya lo sabéis, quiero ser Natasha Zupán, que tiene 47 años y la cabrona está mejor que yo.




Debo ponerme manos a la obra ya.



Hay que ir a Spas, hacerse masajes, comprar buenas cremas e invertir en peelings chachis. Punto. Llamadme frívola, estúpida y lo que queráis. No os hago caso. Yo me quedo con Nietzsche : "El egoísmo es la esencia de un alma noble". Y si habéis leído El origen de la tragedia, sabréis que quien dice egoísmo dice vanidad. Tanto monta...



Me hace mucha gracia cuando me dicen "de vieja, culo o cara???". No, no, no... yo, de vieja, culito y cara de bebé!!! jajajajaja bueeeno, de bebé no, que ya he dejado claro que no quiere ser anaobregonista.


Cremas con antioxidantes, peelings con AHAS, cuidarse el pelo (da igual que no tiñas las canas, pero tiene que estar cuidado y suave), encontrar un buen médico cosmetólogo o como se llamen y vestirse sin enseñar tanto las carnes.

Y dormir bien. Hay un gran tópico que es una gran verdad: dormir mínimo ocho horas seguidas. Lo he escuchado toda la vida de mujeres divinas en la tele, en plan, dime tu secreto de belleza y cada vez que lo decían yo me moría de la risa. Te va a creer tu madre, Rita... secreto de belleza dormir, ya ya... Pues chicas, es fundamental. Sólo cuando no te dejan dormir te das cuentas de ese gran axioma. Cuando no duermes, envejeces 10 años en una semana.

Así que empecemos por ahí. Vamos a dormir y luego a mirarnos en el espejo.

Sócrates escribió en Delfos "conócete a ti mismo" y yo escribo aquí "mímate y envejecerás fetén".

Ah... y ya por pedir, hacer un poquito de deporte, que las bingo wings son un peligro inminente.


Besos a todas

Lula P.

En las fotos, de arriba abajo: La primera y la cuarta son de Natasha Zupán (la segunda imagen del blog Bubble Club, de Carlos Alba), Lena Olin, Jacqueline Bisset, Bianca Jagger con su hija y Cristina Macaya, otra mujer 'madura' divina que vive en Mallorca (fotos pilladas de Google).

domingo, 29 de mayo de 2011

Así seré cuando sea mayor


Yo ya lo tengo decidido. Antes quería ser como Julianne Moore cuando me acercara a los 50, pero ahora no, ahora ya sólo quiero ser como Natasha Zupán!!!!

No puede ser más ideal, más guapísima, más contemporánea...

Aquí la podéis ver en su casa de Valldemossa, Mallorca, en el post de Bubble Club, el blog del fotógrafo Carlos Alba.

Hay muchas cosas que comentar de esa casa y esa mujer. Empezaremos por los pendientes. Así se llevan unos pendietnes largos, coño!!! Y yo que dejé de usarlos hace cinco años!! En qué estaba pensando??!!!!!!!! Son bonitos, le dan ese carácter relajado y bohemio pero ultrachic que tanto escasea en la alta societé mallorquina.

Natasha Zupán, para quien no lo sepa, es una artista americana y rica que vive desde hace mil años en la isla.



Atención al jarrón de porcelana y al mantón con el que cubre el aparador... Y yo que hace poco le comentaba a MissB que no me había fabricado un tocador con una seda de chinoiserie por miedo a que mi habitación pareciera la de una hippie loca por las telas!!!!!!!



Pienso sacar un mantón de Manila que tengo de mi abuela, color crema... mmm... quizás, quizás... Lo probaré. Una de dos, o me saldrá de puta madre como ella (dudo, dudo) o quedará en plan efecto 'llamagatos' (rollo las viejas que tienen casas llenas de gatos, para que visualicéis).

No es por desconfiar de mis habilidades en deco, pero me da que no cuajará. Ya os contaré.

Y para terminar... el pelo y las deportivas que hay en el suelo.

Ese pelo alborotado y natural, fuah, llevaría a la bancarrota a GHD, fijo. Además, bastante corto. Creo que es el momento de pasar la tijera a las melenas.

Y las depor... pues nada, que MissB tenía razón, ya estamos tardando en tener unas New Balance!!

A otra cosa mariposa. Mi vestido de Cos ha salido en Sartorialist!!! Ya sabéis que cuando pasa, cuando algo que tengo sale en algún sitio así, hago una fiesta que ríete tú de la comunión de tu prima. Yesss, i'm a friki, friki woman!!


Lo compré hace un par de años y no me decidí a ponérmelo hasta hace un mes. Yo lo llevo sólo con las Converse, tendré que probarlo con sandalias. Es difícil que quede bien con cualquier calzado, la falda no tiene vuelo y tiende a quedar rollo monje tibetano. Pero le voy pillando el punto.


Besos a todas.

Lula P.


EDITO: Sí quieres averiguar lo listísima que soy, no seas vaga y sigue leyendo



Hoy voy a postdatear lo último que me ha pasado con mi hijo de cinco años recién cumplidos. Para que os hagáis una idea de la clase de madre súperinteligente que soy.

En la cocina, cenando los dos juntitos:

Yo: A ver, mi amor, cuéntame lo que has hecho hoy en el cole.

Mi hijo: Muchas cosas mamá, aranomacuerdo.

Yo: Cómo que no te acuerdas? No puede ser, haz memoria que a mamá le gusta mucho que le cuentes todo. Venga, piensa...

Mi hijo (tocándose con una mano la barbilla y mirando al techo con cara de 'estoy pensando mucho'... últimamente hace mucho ese gesto, no sé de dónde se lo ha sacado porque como veréis, de su madre no): Mmmmmm

Yo: Yyyy?

Mi hijo: Te cuento una adivinanza mami. Veeeeerde por fueeeera, blaaaaanca por deeeeentro. Si lo quieres saber, espera.

Yo (muy seria, en plan, para que veas la mami tan lista que tienes): SANDIA!!!!!!!!

Mi hijo (súper normal): No. Pera.

Y siguió comiendo sin darse cuenta de que su madre es subnormal profunda.

Y yo disimulé y disimularé y no se lo pienso contar hasta que tenga por lo menos 60 años el niño.

jajajajaajajajja

Ahora sí, besos.

martes, 10 de mayo de 2011

Little parón

Paro el blog durante unos días. Siento no haber respondido a las que me habéis enviado mails preguntándome si pasaba algo. No pasa nada, sólo mucho curro.

Nos volveremos a leer después del 22-M.

Sed felices.

Besos para todas

Lula P.

domingo, 1 de mayo de 2011

Verde morena

Lo mío con el verde es un amor heredado. Era el color favorito de mi madre y ya de jovencita decidí que también sería el mío. Es un color jodido, complicado de llevar, casi más que el amarillo. Y encontrar algo verde que sea guay es pura carambola. Pero si lo encuentras, si tienes la suerte de tener un vestido verde y que te siente bien, será tu favorito.



Lo sé, a las rubias os sienta fatal. Os jodéis, a vosotras os queda mejor el rojo, así que lo dejamos en tablas.

Es cierto... el verde no sienta a todas bien. Las rubias lo admiten bastante mal. Bueno, siempre hay excepciones, ahí abajo podéis ver a Teresa Baca ideal. Pero claro, está ese "pequeño e insignificante detalle" de que ella es... modelo:


A las castañas les queda pichín pichán, según sea la percha... pero a las pelirrojas y sobre todo a las morenas suele sentarles de muerte.

Llevar algo verde es una cuestión de fe y de inteligencia. Quizir, no te puedes poner cualquier vestido algodonero del Trafa en color césped. Nou, nou. Hay que encontrar tonalidades, texturas...



Te pruebas un vestido de seda verde selva y te miras al espejo y te ves tan guapa y tan mujer y te entran unas ganas terribles de pintarte los labios rojos... Ese, queridas mías, es el momento verde por excelencia.

Luego hay otros momentos verdes... los hay agua marina en vestidos gaseosos de verano, relajados, holgados y hasta la rodilla.

Y también, evidentemente, están los momentos verde Expiación. El archicomentado vestido. Vamos, que si en Google pones vestido verde es el primero que te sale, y varias veces. ¿Cuántas babeamos con él?

O sea, cómo os lo diría yo... me veo totalmente con ese vestido. Y punto.


Y los verde Pippa. Yo diría que la hermanísima quería ser Keira... pero no lo consigue. Ese tono turquesa es tan Oh Qué Luna!!!:

La hermanísima tiene cara de ser una loba de cuidado. Yo creo que acabará liándola parda con Harry o con Charles o vete tú a saber... pero la liará, fijo.

Hablando de Pippas, súperapoyo lo que dice Emilia Landaluce en su blog. Telma-Pippa, Letizia-Catalina... jojojojo Y añado que mientras las hermanas feas duermen en la cama real y adquieren con el tiempo cara de haber comido un pepino amargo, las hermanas guapas se follan a todo el reino tan ricamente y sin protocolos, oyes. Juassss

Paro con este minimomento royal y vuelvo al verde. Particularmente no acepto los acepto ni lima ni pistacho ni fosforito ni pastelón (salvo como digo el aguamarina, que no es pastel si no un verde que tira a azul, o un azul que tira a verde... como el agua mediterránea).

También podemos salpicarnos con verde en los pendientes o en algún anillo, aunque lo cierto es que en la mano prefiero un pedrolo azul. Resulta que en una joyería de mi ciudad he visto unos muy muy muy parecidos... uno con zafiro y otro con esmeralda.


A mí las esmeraldas me fascinan, pero es que los zafiros... Buf, ahí me divido totalmente. Joder, será la edad o yo qué sé, pero últimamente pierdo el sentido con las joyas. Me hago vieja, antes no les hacía mucho caso. Ahora las miro y me creo Lyz Taylor.



Yo tengo varios vestidos verdes y una falda que no me quito en todo el verano. Aunque la verdad es que cuando era jovencita (segunda vez que utilizo este atributo en esta entrada, síntoma inequívoco de que, efectivamente, empiezo a ser viejuna)... pues eso que cuando era jovencita también tenía épocas en las que me pintaba ligeramente los ojos de verde. Con sombra muy, muy sutil. Sé que suena terrible, pero no lo es. Os prometo que a las morenas nos queda sensacional, sólo hay que elegir el tono adecuado y dar muy poca sombra. Yo llevo años sin hacerlo, pero ahora he decidido que voy a volver a mis orígenes y recuperar el verde en mi vida.

Así que... morenas del mundo, a poneros verdes!!!!!!!!!!!!

Un beso a todo el mundo.

Lula P.

(La primera foto es de The Little Fashion Treasury , la de Teresa Bacca de Chic too Chic ) y la tercera de Trendy Crew, gracias Nina por aportarla)